Enviado especial de la NASA (1968), a invadir por primera vez Venus en una nave espacial preparada en hangares secretos bajo territorios de Utah.
Este personaje asediado por una educación temprana y cuidadosamente fina, logra pasar
su infancia en viajes astrales por nuestra galaxia, mas conocida como la vía lacte,
imaginándose por dentro que algún día se podría llegar al centro del enigma que guardaba nuestra energía en el sistema solar.
Aplicando toda su fe en creer ciegamente en sus pensamientos, y confiar en su memoria, sabía que el hombre era capaz de plasmar en papel las soluciones a problemas que siempre azotaron a nuestra civilizaciones.
Muertes sin sentido y guerras que no tenían un cometido, lograron encerrarse en la cuestión de todo este asunto cibergaláctico.
Ya con la adolescencia en pleno embullecimiento de todo su potencial cerebral, memoria y sumándole su intusion como un buen padre de familia que protege a sus hijos por estática automática; des pues de una investigación exhausta logra entender que en venus,
se hallaba una respuesta que iba mas allá de la imaginación.
Tal es así que para ese entonces el ya avanzado sistema americano ICP o PCI (Identidades, Civiles del Planeta), lo recluta para la misión.
Después de meses de trabajos personalizados para la misión, el 31 de Octubre de 1968,
despega en un Boing, 797-500 Super-Charge, en instantes que este mismo logra su máxima
latitud, se despliega la nave que iba a llevar a Solono a Venus.
2 años 8 meses y 23 días mas tarde, vuelve de la misión, y como no tuvo ningún tipo de comunicación con la tierra, estaban esperando las noticias del descubrimiento,
tan ansiosamente como el estaba también de compartirla.
Y con una voz calma, se acomoda en su equilibrio neuronal y cuenta esto:
"Viaje mucho tiempo, pase mucha hambre, sufri mucho calor alla lejos, pero cerca del sol, buscando un sentido a todo esto de dar vueltas al rededor del sol y no poder
cuidar la naturaleza de nuestra planeta, siendo nosotros lo suficientemente capaces
inteligentes y tolerantes como para no hacerle mas daño.
Así es que estuve decidido a dejar mi vida para encontrar en aquel planeta lo que en mis sueños veía,
y ella apareció, era una mujer lo que no veía en mis sueños claramente, tan glorioso como eso, pero nunca había tenido su imagen su rostro frente a mi, quizá era su espalda que me hacia confundir, y cuando la encontré me dijo; "me veras siempre de lejos, cerca del sol, cerca de la tierra, pero un poco mas lejos de Marte, aunque no tanto como para pasar la nube de polvo y no poder ver a Saturno. Siempre que me mires, la energía que te daré desde Venus, curara las heridas que cargas en tu Tierra, vuelve en paz, que yo velare con el sol por vos."
Fabrio Solono hoy vive en una isla en el Pacifico, junto a unas palmeras tomando sol, bañándose en las aguas azules de aquel océano mas grande de la tierra.
Y la tierra no vibro nunca mas, de mas.
Comentarios
Publicar un comentario